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No todos los que aplican a mi programa están calificados para recibirlo. No porque no puedan pagarlo, sino porque aún hay pasos que necesitan dar antes de trabajar conmigo.
¿Qué tiene que ver eso con el asunto del correo? Todo.
Parte de definir mi negocio, tiene que ver con el impacto y la coherencia. Si mi programa no te apoya a recibir lo que realmente necesitas ¿Para qué tomar tu dinero?
Y es ahí donde interviene la pregunta ¿Qué tipo de negocio quieres?
No todos queremos ser un Steve Jobs, ni tenemos que quererlo. Entonces, definir el negocio que quieres para ti, el que te funciona y el que te emociona te permite a tomar decisiones más enfocadas e intencionales.
En mi caso, mi negocio es una herramienta que me apoya a estar presente y disfrutarme el proceso de existir, mientras apoyo a otros a hacer lo mismo 😌. Alinearlo con mi vida, no es algo extra, es la base. ¿Para qué crear un negocio que no me permita vivir?¿Para quién, si eso no es lo que me funciona?
Hace un año me enfrenté a esa pregunta:
Mi marca generaba, atraía y conectaba en su modelo anterior. Mis servicios se repartían entre diseño y mentoria. Mi negocio funcionaba en su formato y crecía.
Sin embargo, recién me mudaba a Florida (El lugar con el que años soñé) y yo había cambiado, esta vez era aún más intencional y quería alinear el formato de mi servicio con eso.
Inicié con una persona, realizamos el makeover de su mindset, luego el branding y la optimización de su negocio.
Y es de ahí de donde salió The Brand Shifter.
Pero algo aún no me terminaba de encajar.
Luego de implementar con varios clientes, me di cuenta de que era.
Si bien su nombre era catchy, el cliente no se iba solo con una transformación de su marca y para mi tampoco era eso, así que quería expresar el servicio lo mas acorde a su resultado.
Es así cuando escuché el testimonio de una cliente donde decía “Esto fue más que mi marca, lo que tengo está en completa alineación con lo que soy y con lo que quiero ser a futuro”.
Y así, cambiamos a Aligned, mi programa actual. Un programa 1:1 de transformación donde elevamos tu mensaje, identidad, oferta y sistema en alineación con tu autoridad y visión.
¿Y por qué te compartí esto?
Si te fijas, hay dos evoluciones en un mismo año, y la razón es simple: Cuando trabajas desde la alineación, el negocio que quieres evolucionará a medida que creces.
No hay una forma específica de hacer negocios:
- Hay quienes lanzan hoy, y a los 10 años tienen el mismo negocio y se lo disfrutan
- Hay quienes quieren romper la liga, ser uno de los mejores del país y están dispuestos a sacrificar su vida actual por ello
- Hay quienes quieren un negocio que se alinee con ellos a medida que crecen y les permita vivir en coherencia, disfrutarse el proceso de crecer
- Hay quienes prefieren un side hustle y listo
Ninguno está mal, ninguno es mejor que el otro. Son experiencias diferentes y punto. No tienes que seguir lo que a los demás le funciona, viniste al mundo a vivir desde tu autenticidad y experiencia única.
Por eso vuelvo y te pregunto:
¿Qué tipo de negocio quieres?
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