Hoy hablaremos de trabajo inteligente.
Literalmente estamos en la “revolución digital” casi pasando a la de datos, lo que indica que la forma de generación económica implica digitalización, sin embargo muchas marcas llevan su negocio “en digital” con la misma mentalidad del trabajo duro.
Haciendo posts manuales, invirtiendo horas en conversaciones, mensajes y correos, y cargando con el proceso de todo su negocio sin un esquema establecido.
Es momento de actualizarte a la era.
Para esto te invitaré a conocer una palabra clave: “Sistemas”.
Un sistema es un conjunto de procesos ordenados que te apoya a eficientizar tu negocio.
Simplificándolo aun más, es el 123 que necesitas para llegar a hacer algo en tu negocio.
Tener sistemas te apoya a liberar tiempo, visualizar mejor tus resultados y optimizar tu día a día.
Te presento dos sistemas de ejemplo que puedes implementar en tu negocio:
- Sistema del proceso ventas: Todos los procesos que intervienen en el proceso de realizar la ventas, para que tengas un récord exacto de como se genera la venta luego que el cliente dice que si por ejemplo: link de pago, Correo de pago, correo de seguimiento, confirmación de la venta.
- Sistema de entrega del servicio: Todos los procesos que intervienen en la entrega del servicio o producto: Correo de bienvenida, link para agendar sesión, seguimiento a las tareas, etc.
Estos son solo dos ejemplo, puedes implementar los sistemas que necesites.
La base de un sistema es que te permita medir, aprender y optimizar. Luego de optimizar es que pasas a la afamada “Automatización”.
Lo simplifico nuevamente:
Optimización: Que el sistema funcione mejor con menos recursos (Con intervención de la tecnología o no).
Automatización: Que la tecnología lo haga casi todo por mi.
Si no tienes un sistema; no sabes qué funciona, no puedes aprender de él y al automatizar estarías invirtiendo en algo a ciegas, que no necesariamente apoya a tu negocio a crecer.
Aplicar sistemas es la base de Trabajar inteligente.
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